"The Cheat" (1931), de George Abbott
Viendo películas de la era pre-code, no puedo dejar de preguntarme hasta donde habría llegado el cine americano de no haber entrado en circulación el Código Hays en pleno 1934 y hasta que punto habrían evolucionado sus historias y sus personajes de no haber limitado esta censura el talento de muchos cineastas y de la mayoría de los guiones. Hasta entonces, la mayor parte de los papeles más interesantes eran los femeninos, porque salvo excepciones, la mayoría de los papeles femeninos de estas películas de la era pre code (entre 1929 y1934), eran mujeres que quizás hoy en día reconoceríamos como modernas: mujeres liberadas, audaces, independientes. Luego llegó el Código Hays y convirtió a estas mujeres en algo diferente, las colocó en un segundo plano y ya dejaron de ser mujeres tan libres y tan audaces.
“The Cheat” es una película en plena efervescencia de la era pre code y además protagonizada por una actriz también con fama de audaz y totalmente liberada, Tallulah Bankhead. No es que sea la mejor película del mundo en el sentido más artístico del término pero a mi me ha encantado por ese aire tan ingenuo y libre a la hora de contarnos un casi culebrón algo bizarro.
Tallulah Bankhead interpreta a Elsa Carlyle una aristócrata con una debilidad compulsiva por el juego y cuyo marido anda medio arruinado intentando recomponerse de grandes negocios fracasados. En una de estas noches de fiesta pierde una gran suma de dinero y ahí es donde empiezan sus problemas. Hardy Livingston, un playboy millonario coleccionista de mujeres en sentido más literal del termino, se ofrece a prestarle el dinero a cambio de que se convierta en su amante.
Es extraña la forma en que se suceden los acontecimientos en esta película sencilla a pesar de su argumento algo bizarro. Livingston que tiene una fijación por todo lo nipón, que se rodea de criados japoneses, y tiene su gran mansión decorada como una casa japonesa, es un ser extraño y con tendencias sádicas. Cuando Elsa es llevada a su casa y Livingston le enseña su colección de muñecas hecha a imagen y semejanza de las mujeres que han pasado por su vida, la expresión en el rostro de Elsa ya denota que se ha introducido en arenas movedizas y peligrosas, sin embargo consiente y acepta el dinero que éste le ofrece.
“The Cheat” es una película en plena efervescencia de la era pre code y además protagonizada por una actriz también con fama de audaz y totalmente liberada, Tallulah Bankhead. No es que sea la mejor película del mundo en el sentido más artístico del término pero a mi me ha encantado por ese aire tan ingenuo y libre a la hora de contarnos un casi culebrón algo bizarro.
Tallulah Bankhead interpreta a Elsa Carlyle una aristócrata con una debilidad compulsiva por el juego y cuyo marido anda medio arruinado intentando recomponerse de grandes negocios fracasados. En una de estas noches de fiesta pierde una gran suma de dinero y ahí es donde empiezan sus problemas. Hardy Livingston, un playboy millonario coleccionista de mujeres en sentido más literal del termino, se ofrece a prestarle el dinero a cambio de que se convierta en su amante.
Es extraña la forma en que se suceden los acontecimientos en esta película sencilla a pesar de su argumento algo bizarro. Livingston que tiene una fijación por todo lo nipón, que se rodea de criados japoneses, y tiene su gran mansión decorada como una casa japonesa, es un ser extraño y con tendencias sádicas. Cuando Elsa es llevada a su casa y Livingston le enseña su colección de muñecas hecha a imagen y semejanza de las mujeres que han pasado por su vida, la expresión en el rostro de Elsa ya denota que se ha introducido en arenas movedizas y peligrosas, sin embargo consiente y acepta el dinero que éste le ofrece.
“The Cheat” es una película desinhibida como la mayor parte de las películas de la era pre-code y ademas, el mejor ejemplo para ver como vivian los ricos en plena depresión americana. La tensión sexual que se puede respirar en algunas escenas, los diálogos directos sin trampa ni cartón y la presencia siempre fresca y vital de Tallulah Bankhead la convierten en una obra atractiva y audaz. Tal como he comentado más arriba, no es la cima de la era precode, pero si que es una de las películas que mejor representa esta interesantisima época del cine americano.
3 Comments:
No he visto esta película (que no conozco de nada, deberíais incluir una nota a pie de página acerca de donde se pueden encontrar las películas que comentas!) pero el otro día viendo con la boca abierta Design for living tuve que recordar que se hizo antes de la promulgación del código Hays!
Abbas,
"The Cheat" está editada en Usa, viene en un pack dedicado a esta era precode; no es el único pack al respecto, hay varios mas editados en Estados Unidos.
saludos
Y no es la única Tallulah, estaban Ruth Chatterton y Dorothy Mckaill. La primera, aún más atrevida y más "in your face" que Mae o Tallulah.
No diré que el cine americano no contó la verdad a partir de 1934, pero está claro que se cortó la posibilidad de reflejar una realidad de la calle que luego cuando llegó la guerra y el neorrealismo italiano, se perdió para siempre. Hay ahí más de 10 años de Mickey Rooney que se los llevó el viento.
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